Resulta curioso encontrar en esta zona un entorno tan húmedo y frondoso. Esto es posible gracias a que los altos cortados de piedra están encarados directamente hacia el norte, y atrapan la humedad en el pequeño embudo que forman. |
Arroyo Madre. |
Arroyo Madre. |
El arroyo de Madre (azul) y el entorno de El Chorrón (rojo). |
Paraje del Chorrón en diciembre de 2020. |
Buitres leonado (Gyps fulvus) |
Buitres leonado (Gyps fulvus) |
Los buitres leonados (Gyps fulvus) se refugian en las oquedades de las peñas. |
Los buitres leonados (Gyps fulvus) se refugian en las oquedades de las peñas. |
León Dormido sobre la niebla del valle. |
Un pequeño bosque de hayas (Fagus sylvatica) se encuentra en las faldas de Cerroyera. |
Las nieblas entrando hacia el valle del Iregua. |
Castillo de Viguera emergiendo entre la niebla. |
Faldas de Moncalvillo. |
Mar de nubes cubriendo el valle del Ebro. |
La zona alta de los chorrones, correspondiente al cordal que divide los valles del Leza y del Iregua, está poblada principalmente por encinas (Quercus ilex), que forman extensas masas. |
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