ALTUNATUR: PRIMERA ESPECIE EXTINTA DEL AÑO 2020: Adiós a un dinosaurio

Con esta triste noticia, sin olvidarnos de la ola de incendios de Australia, empezamos el año 2020: se declara oficialmente extinto el pez remo gigante chino o pez espátula del Yangtsé (Psephurus gladius).

En primer lugar, conozcamos al ser con el que ya no compartiremos el Mundo, uno más.

Este pez pertenece al orden de los Acipenseriformes, al igual que los esturiones, y a la familia Polyodontidae, cuyos integrantes son los denominados peces espátula. Esta familia de peces es muy primitiva, remontándose su aparición a 300 millones de años atrás, es decir, que convivieron muchísimo tiempo con los dinosaurios. Solo quedaban dos especies vivas de peces espátulas, familia que fue muy numerosa en otras épocas geológicas. Ahora ya solo queda una, el pez espátula americano o del Mississippi (Polyodon spathula).

El ya extinto pez espátula chino era un animal impresionante. Podía alcanzar los 7 metros de largo, aunque los tamaños normales rondaban los 3 metros y unos pesos de alrededor de 300 kilos. Era un pez omnívoro, que devoraba todo aquello que encontrara en el lecho oscuro del río, aunque también nadaban mucho a media agua. Las sospechas llevaban ya tiempo sembrando el miedo en la comunidad científica, ya que el último alevín fue visto en el año 1995, y desde 2003 no había sido capturado ningún ejemplar de cualquier edad. Era una especie anádroma, es decir, que vive gran parte de su vida en el mar pero necesita remontar el río para reproducirse. Y esa fue su perdición, ya que dependía completamente del gran río Yangtsé. Este río es el mayor río de China y de toda Asia y con sus 6.300 kilómetros es el tercer río más largo del Mundo. Su cuenca tiene aproximadamente 1.800.000 kilómetros cuadrados y posee un caudal de unos 32.000 metros cúbicos por segundo en su desembocadura. Para hacernos una idea de la importancia que tiene el río para el país, sus aguas sustentan el 70 % de la producción de arroz de China y a lo largo del curso del río viven unos 400 millones de personas, aproximadamente un tercio de la población china. Eso hace que en el entorno del río se produzca hasta el 40% del PIB del país. Por todo esto es fácil imaginar los enormes impactos que este río debe soportar. Por ello la especie ya había venido sufriendo un gran declive durante toda la segunda mitad del siglo XX. Uno de los impactos más destacados es, sin duda, la Presa de las Tres Gargantas, la presa más grande del Mundo, cuya construcción empezó en 1995 y se terminó unos 15 años después, y que ha tenido un innegable efecto negativo en toda la ecología de este gran río, siendo una de las principales causas de la extinción del pez remo, debido a que le impide realizar sus migraciones. Esta presa fue también la principal causa de extinción del baiji o delfín del río Yangtsé (Lipotes vexillifer), un cetáceo de agua dulce endémico de la zona, declarado extinto en el año 2008.

Leyendo esto es difícil ser optimista con respecto al futuro que le espera a este río, que pese a ser uno de los más grandes del planeta, ha sucumbido a la enorme y creciente presión humana. Quién sabe cuántas agresiones más podrán soportar este y otros ríos hasta que los daños sean irreversibles. En el caso de estas dos especies, y otras, ya lo ha sido.

En conclusión, merece la pena recapacitar acerca del hecho de que un pez tan antiguo como los dinosaurios, más incluso que muchos de ellos, haya conseguido permanecer durante millones de años en su entorno, sobreviviendo a catástrofes globales, y no haya podido soportar la presión humana ejercida durante apenas un siglo. Ante esto se puede afirmar que los seres humanos somos una verdadera catástrofe, mayor incluso que un meteorito...